Especialidades gastronómicas del Chianti: los embutidos



¡E incluso en el campo de los embutidos la variedad no falta! La preparación y conservación de la carne de cerdo en varias formas, es efectivamente en el Chianti un arte muy antiguo, como se puede ver de la difusión de las “norcinerie” (=carnicerías especializadas en el tratamiento de carne porcina).

Posiblemente el embutido más típico y particular que podrá degustar es la “Finocchiona”, un chorizo de cerdo en pasta suave aromatizada con ajo, sal y, como lo dice el nombre, con semillas de hinojo (Finocchio en italiano). La “Finocchiona” tiene una hermana, la “Sbriciolona”, de diámetro mucho más grande, así llamada por su consistencia todavía más suave: si durante sus vacaciones la encontrase y quisiera intentar rebanarla... será muy difícil, porque se desmenuzará en muchos pedazos pequeños.

Si luego desean probar y saborear toda la gama de embutidos del Chianti, entonces vayan una tarde a cenar en uno de los restaurantes típicos del Chianti y pidan la Coppa y el Capocollo (cortes enteros y añejados de lomo de cerdo), también la más típica Finocchiata de Montefioralle (corte entero, tierno y sabroso, del tocino de cerdo, sin cuero, también sazonado con semillas de hinojo selvático), el Gerbolo (el corte de cerdo menos graso y delicioso, adecuado para los carpachos), el Prosciutto de Greve en Chianti en las dos versiones, dulce o sazonado, añejado de 12-18 meses, y finalmente la Pancetta (de la panza del cerdo) y el Lardo Blanco de la Val di Greve preparado solo con la grasa más tierna.

Pero la gama de los embutidos del Chianti no termina aquí: hay embutidos y las salchichas de Cinta Senesa, una raza porcina local, muy prestigiosa, rigurosamente criada al aire libre. Su carne es aún más sabrosa, utilizada para la producción de embutidos, como aquellos arriba descritos, pero también por la famosa “porchetta” una forma de gran asado, hecho con todo el cuerpo del cerdo relleno de menudencias y de hierbas aromáticas.

Entre las excelencias, les aconsejamos probar el Salame Nobile de Greve, el Salame al Chianti y sobre todo los particularísimos prosciuttos y los salames de jabalí: ¡un verdadero especiado lujo!

¡Casi lo olvidaba...! Hay también algunos productos menos conocidos, pero típicos del territorio y de la tradición campesina: la Soprassata (un chorizo hecho con las partes de la cabeza del cerdo) y el Buristo (un chorizo de carne y sangre de característico color negro). En suma, hay verdaderamente ¡para todos los gustos!

Para degustar todas estas especialidades, como alternativa “más económica” en el restaurante, podrían organizar una gran “tavolata” (gran mesa) con amigos y parientes en una de las grandes cocinas de las que son provistas las típicas casas rurales del Chianti.

Entonces, si han tomado en alquiler, para sus próximas vacaciones, una casa rural, hagan una visita a uno de los muchas tiendas de la zona “especializadas” en embutidos, cómprelos junto a una botella de buen vino Chianti y... ¡buen apetito!

 

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